martes, 11 de febrero de 2014

Los nuevos tintos de Casablanca

Son vinos de nicho, audaces, pero de alto valor agregado, una punta de lanza que refresca el portafolio del valle, profundizando en el carácter de un pionero que no se queda dormido en los laureles, sino que siempre va por más.
Es una cepa multifacética, generosa, que se ha adaptado mansamente a las distintas condiciones de los valles chilenos. A pesar de su reciente introducción a finales de los 90, la Syrah ha sabido demostrar una personalidad firme, atractiva y rendidora. Su asombrosa consistencia –no tiene las mañas del Carmenère y esa aversión a las altas temperaturas del Merlot o Cabernet Sauvignon– permite una muy buena oferta de vinos en todos los segmentos de precio y reinventarse, una y otra vez, buscando nuevos facetas y nichos de mercado.

Sin embargo, la pérdida de valor de la Syrah en el concierto mundial, principalmente por la desmesurada fiesta australiana, ha obligado a esta cepa a intentar la conquista de nuevos paladares, más exigentes y educados. En Chile, a partir de las últimas décadas, comienzan a irrumpir, en un comienzo con cierta timidez, representantes de climas costeros, que reflejan una nueva ecuación entre azúcar y acidez, cuerpos más delicados y notas que se alejan de las mermeladas y los más pesados tonos cárnicos, para brillar con sus flores y pimientas multicolores.

En Casablanca, la flamante Capital Mundial del Vino, la Syrah fue recibida con algo de suspicacia. ¿Para qué ir contra de la naturaleza? ¿Por qué no concentrar los esfuerzos y empujar aquellas cepas que conviven mejor con las características edafoclimáticas casablanquinas, como Sauvignon Blanc, Chardonnay y Pinot Noir?, se preguntaba hace algunos años un pionero del valle. Sin embargo, el éxito en la crítica, especialmente en los paladares británicos, han incentivado a las bodegas del valle a incluir en su portafolio la Syrah. Hoy no tenerlo es ir contra la naturaleza comercial o, más bien, contra la moda imperante, que exige –exige pero aún entrega poco y nada a cambio¬–, tintos más frescos y audaces.

La Syrah, junto al Merlot y algunos pequeños spots de Cabernet Franc y Malbec, han terminado por teñir la Casablanca, tanto así que la presentación de los primores tintos de Casablanca –o Tintos de Clima Frío– se ha convertido en uno de los más esperados hitos del año. Hace algunas semanas, en las hermosas instalaciones de Bodegas RE, una docena de viñas descorcharon sus últimas cosechas, demostrando la consistencia de una cepa que llegó con ciertas dudas, pidiendo permiso, pero, sin lugar a dudas, llegó para quedarse.

Si bien la Syrah en Casablanca no permite producir grandes volúmenes –ni pasa por su mejor momento comercial como cepa–, sí fortalece el posicionamiento del valle, mostrando una cara más versátil e innovadora. Sin abandonar los esfuerzos por el Merlot u otras cepas tintas que podrían agregar emoción y diversidad, la Syrah tiene un lugar destacado en la categoría de vinos de especialidad o en segmentos más altos de precio, pero para eso los empresarios vitivinícolas de Casablanca tienen un enorme desafío por delante: dejar de vender Syrah –en un carro desbordante, que ya no necesita actores que vendan más de lo mismo– y empezar a empujar con mayor fuerza Casablanca como denominación de origen, como una marca pionera, fresca y atrevida, que no se queda dormida en los laureles, sino que siempre va por más.


DESTACADOS DE CASATINTA

Bodegas RE Syrahnoir 2013

Con un 70% de Syrah del fundo El Refugio y el resto Pinot Noir de El Ensueño, sus uvas fueron cofermentadas para conseguir una mayor complejidad e integración. Es un vino excéntrico, floral y profundamente fresco. Delicado, pero muy firme a la vez.

Estancia El Cuadro (El Acierto) 2012

Proviene de unas cuantas hectáreas del sector de Tapihue, pero las suficientes para que este centro de eventos se reestrene como corresponde: con un Syrah muy austero y jugoso. Pura fruta roja salpimentada, sin interferencias ni delirios de grandeza.

Emiliana Signos de Origen Syrah 2012

Proveniente de La Vinilla, uno de los sectores altos del valle, este vino es un gran signo de voluptuosidad. Posee una nariz que huele a charcutería y fruta dulce, y una estructura firme, musculosa, que augura muy buenos años de evolución.

Veramonte Reserva Merlot 2012

El Merlot es una cepa que no hay que descuidar y Veramonte, después de mucho trabajo, comienza por fin a tomarle la mano. Aquí encontramos mucha fruta roja, madura y elocuente, y una pimienta negra que contrasta con su dulzor. Jugoso y muy fácil de beber.

Quintay Q Syrah 2012

De las hermosas laderas de Mina de Agua, este Syrah se caracteriza por su potencia y exquisita combinación de tonos florales y de fruta roja. Es un vino firme y concentrado, que expresa de muy buena manera el potencial de los suelos graníticos de Casablanca.

Morandé Terrarum Merlot 2010

Con su fruta del fundo Belén, este Merlot es un muy buen ejemplo de la consistencia que puede lograr la cepa en el valle y a una excelente relación precio / calidad. Es un vino jugoso, simple y alejado de la sobremadurez.

Mancura Leyenda Gran Reserva Syrah / Cabernet Franc / Merlot 2011

Una mezcla entretenida y que resume muy bien el potencial tinto del valle. Con una barrica aún muy protagonista, donde resaltan los aromas de granos de café y chocolate amargo, aparecen expresivas notas florales y de frutos rojos.

House Casa del Vino Tirazis 2011

Un Syrah muy completo aromáticamente y con una excelente estructura frutal. Se sienten notas de frutos del bosque, pimienta negra, pero también ciertos tonos herbales que refrescan el conjunto. Un vino jugoso y firme.

Loma Larga Lomas del Valle Quinteto 2012

Esta viña es la gran especialista en tintos del valle y con este Quinteto compuesto de Cabernet Franc, Syrah, Malbec, Merlot y Pinot Noir resume de gran forma el potencial de sus laderas. Es un vino floral, liviano y jugoso, que no esconde sus marcadas notas herbales, y que profundiza con gracia y notable frescura en el paladar.

Carmen Reserva Merlot 2011

Proveniente de sus viñedos de San Miguel y Santa Inés, este Merlot es otro ejemplo de franqueza con la cepa. Con notas de ciruelas y frambuesas, y trazos de pimienta verde, demuestra toda su simpleza, jugosidad y frescura.

Casas del Bosque Pequeñas Producciones Syrah 2012

Este Syrah, proveniente de una de las zonas más frescas del valle, es sinónimo de elocuencia. Aquí encontramos potencia frutal, pero también mucha elegancia. Con notas de violetas, arándanos y guindas, mucha pimienta y ciertos tonos herbales, es un Syrah con un buen presente, pero con un tremendo futuro.

Casablanca Neblus 2011

Nace en las partes más altas del fundo Santa Isabel, en suelos de puro granito, lo que moldea una personalidad firme y seria. Fermentado en barricas con granos enteros, al oxigenar la copa irrumpen el humo y sus expresivos frutos silvestres. Es un Syrah concentrado, pero muy fino. Un gran top de línea para esta cepa.